¿Es peligroso hacer autostop?

Hacer autostop es una experiencia que comporta un alto grado de riesgo percibido. Hablando con personas de tu entorno, comprobarás que muchas de ellas expresan preocupación o se resisten firmemente a creer que hacer dedo pueda ser una experiencia recreativa relativamente segura e increíblemente agradable.

Te darás cuenta de algo extraño cuando hables con otros sobre hacer autostop. Todo el mundo tiende a responder con mucho entusiasmo cuando les cuentas una anécdota: escuchan asombrados las extrañas situaciones en las que te encontraste, la peculiaridad de las personas que conociste, etc., y desean poder tener el tiempo y la libertad para hacer lo mismo. No obstante, cuéntale a una persona tus futuros planes para viajar haciendo autostop y rápidamente te pondrá mil pegas, enumerando un sinfín de problemas posibles, proyectando así sus propios temores infundados en ti hasta que las dudas más pequeñas se conviertan en obstáculos infranqueables.

Hacer autostop y, sobre todo, hacerlo exitosamente, requiere confianza. No escuches a los detractores y sus discursos llenos de negatividad y desánimo, a menos que provengan de una persona que hable por experiencia propia. Sin embargo, es importante no ignorar los riesgos que puede comportar esta manera de viajar. Pasaremos mucho de tiempo en este libro hablando sobre cuáles son exactamente estos riesgos y cómo gestionarlos, pero, por ahora, debes saber que los peligros del autostop son mucho menores de lo que la gente cree. Mientras tengas buen juicio y trates a las personas que te rodean con respeto y amabilidad, la probabilidad de tener experiencias positivas es muy elevada.